Era una pelea rodeada de preguntas acerca de las posibilidades reales de
un peso liviano natural como Benson Henderson contra un rival de
categoría wélter. Por ejemplo, sabíamos y sabemos que su fuerte no es el nocaut, y si no había
sido noqueador en las 155 libras, menos aún lo sería en las 170. Y era claro, por otra parte, que haría uso de su velocidad y elusividad contra un rival mucho más alto.
Pero
también había dudas por el lado de Brandon Thatch, mucho menos
experimentado y novato en esto de cerrar veladas en peleas a cinco
rounds. Ahora bien, obviando estos factores si se quiere “psicológicos”,
desde lo físico parecía haber un abismo entre ambos.
Dejemos
estas dudas de lado y pasemos al análisis de la pelea.
Henderson
comenzó trabajando muy bien con las patadas, que combinó con buenos
puñetazos, sobre todo a la zona del cuerpo. Inteligentemente,
decidió no trenzarse en el clinch y entrar y salir, haciendo uso de
su velocidad. Thatch, en cambio, se dedicó a estudiar a su rival
durante los primeros dos minutos, y luego sí se animó a ir
adelante. Daba la sensación de que, cada vez que atacaba, Brandon
podía hacer daño por una cuestión obvia: estaban peleando en su
categoría natural y cuenta con gran ventaja en cuanto a la altura y
el alcance.
Los golpes al cuerpo fueron una de las armas más usadas por Benson. |
En
el segundo round, la pelea se mantuvo en los mismos carriles: Benson
lanzando más golpes, más veloz y preciso, pero, al parecer, menos
potente. Aun así, su jab le sirvió para conectar a Brandon, y
cuando la distancia se acortaba, acudía a buenos uppercuts al
cuerpo. Pero todo cambió cuando restaban dos minutos, porque de a
poco Thatch empezó a perderle el respeto a Henderson y se animó a
golpearlo. Como decíamos, si la velocidad estaba del lado de Bendo,
la potencia salía de los puños de Brandon, y se notaba cada vez que
impactaba, además de hacerse muy notoria en dos ocasiones en que
Thatch lo arrojó al suelo con suma facilidad.
Promediando
el tercer round, Benson consiguió un derribo y tomó la espalda de
Thatch, quien trabó bien sus brazos y le impidió cerrar la
estrangulación. Henderson intentó una transición a llave de brazo,
sin éxito, y así finalizó el round.
La lucha de Henderson le sirvió para vencer a un rival mucho más grande. |
Una
de las preguntas clave era qué pasaría con el factor “cardio”
de Thatch. De Henderson sabemos que ha batallado innumerables veces
en peleas de campeonato... en otra categoría sí, pero la
experiencia la tiene.
En
la mitad del cuarto round comenzó a hacerse patente la cuestión de
la resistencia cardiovascular. Thatch salió mucho más lento y
cansado, cosa que Bendo aprovechó para derribarlo de nuevo y volver
a controlarlo por la espalda. Cuando daba la impresión de que
Brandon se recuperaba, o al menos que podía revertir la posición,
Benson lo llevó de nuevo al suelo, le tomó la espalda y, ahora sí,
cerró un mataleón impecable.
Henderson cerró un mataleón que definió la pelea. |
Excelente
presentación de un Benson Henderson que, aun en la desconocida categoría wélter, se encargó de disipar todas las dudas. Si bien no
tuvo a un rival de primer nivel enfrente, fue una buena medida como
para probarse y ver si decide o no seguir transitando la división de
las 170 libras.
Estos son los otros resultados de la cartelera principal de UFC Fight Night 60: Henderson vs. Thatch.
·
Max Holloway vs. Cole Miller - Peso pluma: Holloway por decisión unánime (29-28, 29-28, 30-27).
Al
cominezo, los dos buscaron dañar por medio de patadas a la zona de
las piernas y el cuerpo, y fue Holloway el primero en impactar de
lleno al hígado de Miller. Luego, entre los agarres, un poco de
lucha y un intento de llave a la piernas por parte de Cole, terminó
el asalto. En el segundo round buscaron el boxeo, y fue Miller el
primero en llevar la pelea al suelo, cosa que no duró demasiado.
Luego se produjo un cabezazo accidental de Max, que cortó la ceja
izquierda su rival. A partir de allí, Miller intentó mantenerlo
alejado haciendo uso de sus piernas; al cortar la distancia, Max
logró un derribo y el round finalizó. En la tercera vuelta,
Holloway fue mucho más agresivo, y se apoyó en su mejor boxeo para
imponer su dominio. Cerca del cierre, Max hizo un despliegue de
habilidad, lanzando patadas espectaculares que, si bien no entraron
de lleno, le sirvieron para retirarse con una mejor imagen. Tras la
decisión a su favor, Holloway pasa a tener un registro de 12-3, y se
establece como un contendiente peligroso dentro de las 145 libras, hasta tal punto que ya tiene próximo rival: Cub Swanson, el 18 de abril próximo.
·
Neil Magny vs. Kiichi Kunimoto - Peso wélter: Magny por sumisión
(mataleón) en el tercer round.
Magny
salió dispuesto a presionar a Kunimoto. No especuló con la
diferencia de alcance a su favor, y fue a meter mucha presión contra
su rival. Pero con el correr de los segundos el combate se paralizó
en un clinch poco productivo hasta que terminó el round. Con
agresividad y variedad de golpes Neil dio inicio al segundo asalto. A
la distancia, dominaba por su alcance, y en el clinch se imponía con
rodillazos. Pero en uno de esos agarres, Kunimoto consiguió un
derribo que no supo aprovechar. Magny se levantó y arremetió con
una tormenta de golpes que pusieron en peligro a Kunimoto, cerrando
con un tacle. Desde la media guardia castigó el cuerpo de su rival
con codos, y enseguida la cabeza, tras tomar la espalda. El claro
dominio de Neil se profundizó en el tercer round, ya que salió
decidido a poner fin al combate. Buenos golpes, tacle, control por la
espalda, ground and pound y mataleón fueron los pasos que siguió
Magny para conseguir una excelente nueva victoria que le sirve para
extender su racha positiva a seis victorias —todas
en apenas un año—, y su récord a 14-4.
·
Dan Kelly vs. Patrick Walsh - Peso mediano: Kelly por
decisión unánime (29-28, 29-28, 30-27).
Walsh
salió con la idea de atacar e ir hacia adelante en todo momento, en
tanto que Kelly fue más cauto, no vaciló en retroceder y trató de
imponerle su ritmo a la pelea. Sin embargo, ni uno ni otro
consiguieron establecer un claro dominio, pues su golpeo se vio
impreciso. En el último segundo, Walsh obtuvo un buen tacle, y así
finalizó el round inicial. En el segundo, y aun con un estilo no muy
vistoso, Walsh lanzó algún que izquierdazo que llegó a impactar en
la cabeza de Kelly. Hacia el cierre de la vuelta, Dan quiso mostrarse
más agresivo, pero su imprecisión no le permitió demasiado. El
tercer asalto se movió en la misma tónica de aburrimiento y falta
de claridad. En fin, la conclusión del combate fue un verdadero
alivio. Con esta pálida victoria, Kelly mantiene su récord invicto,
que mejora a 9-0.
·
Michel Prazeres vs. Kevin Lee - Peso liviano: Lee
por decisión unánime (30-27, 29-28, 30-27).
Prazeres
no demoró en lograr el derribo, tras lo cual tomó la espalda en
busca de una estrangulación trasera. No obstante, el movimiento fue
desbaratado por Lee, por lo cual la pelea volvió a situarse sobre
los pies. Y allí, al menos al comienzo, el brasileño pareció ser
más peligroso, pues impactó con buenas combinaciones a un Lee que
solo al final pudo imponer la diferencia de alcance. En el segundo
round Kevin privilegió el boxeo, mientras que Prazeres, ya menos
preciso, fue por el takedown. Sin embargo, fue Lee quien derribó dos
veces a Michel, terminando el round por encima. Los once años de
diferencia entre los peleadores se vio no bien comenzó el round
final: el veterano Prazeres salió lento, y Lee, ya más confiado y
bajando la guardia, conectó con claridad y consiguió un tacle que,
sumado al ground and pound y la amenaza de un mataleón que casi
cierra, terminó de consagrarlo como ganador ante los ojos de los
jueces. Ahora su récord pasa a ser de 10-1.
· Ray Borg vs. Chris Kelades - Peso mosca: Borg por sumisión (kimura) en el tercer round.
Borg no perdió tiempo, y a los 30 segundos derribó con fuerza a Kelades, estableciendo una posición dominante. Sin embargo, por la constante actividad de Kelades, le costó golpear. Luego Chris se colocó por encima, aunque no pudo castigar. La pelea de pie tuvo poco y nada; Borg se anotó a su favor un derribo con montada completa y luego intentó un triángulo de brazo que fue interrumpido por el final del round. El segundo asalto fue muy favorable a Borg, quien le metió mucha presión a su rival, manteniéndolo casi todo el tiempo bajo su control. Lo mismo ocurrió en el tercer round: a los cinco segundos ya estaban en el suelo. Solo que esta vez Ray obtuvo una posición muy favorable, desde la cual cerró una kimura que obligó a Kelades a tapear. Con este resultado, el nuevo récord de Borg pasa a ser de 8-1.
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