Ronda Rousey revela su dieta mientras entrena para las peleas

En una entrevista concedida a ESPN, Ronda Rousey, la campeona de peso gallo de UFC, se refirió a diversos temas, pero se centró en uno con especial énfasis: la dieta que sigue cuando se encuentra en preparación para una pelea. Y dio detalles muy interesantes con respecto a su alimentación.

Con la idea base de que intenta alimentarse saludablemente, Ronda ofreció un cronograma de un típico día de entrenamiento.

“A las 8 de la mañana comenzamos con dos cucharadas de avena, otras dos de semillas de chía y dos de cáñamo. Luego llega el entrenamiento. A las 11.45, al terminar la primera fase de entrenamiento, un licuado. A las 12, un revuelto, un huevo entero, dos claras y dos bifes de pavo. A las 16, como merienda, una manzana, un puñado de almendras crudas, otro de anacardos (una semilla con buenas propiedades nutricionales); a las 18, otra ronda de entrenamiento y después un batido. Antes de dormir, un té de manzanilla”.

Ronda se prepara para el pesaje; Rogan, detrás, no disimula.

Con respecto a la ingesta de vitaminas, comentó que en lugar de incorporarlas por medio de complementos, prefiere hacerlo con los batidos que toma dos veces por día, compuestos por frutas y verduras frescas. “Una remolacha, una manzana, dos zanahorias, cuatro fresas, una taza de arándanos, dos puñados de uvas, un limón, un poco de espinaca, un trozo de coliflor, perejil, dos tallos de apio, dos cucharadas de semillas de cáñamo, dos de chía, una cucharada de aceite de coco y una hoja de acelga”, detalló la campeona.

Además, habló de la otra cara de la alimentación y de su experiencia personal con respecto a la imagen corporal: "Mira, no hay nada mal contigo ni con tu disciplina por el hecho de que comas cualquier cosa. Pero si lo mejor de tu día es lo que comes, definitivamente hay algo mal en tu vida. Lo que cambió para mí es que yo siempre estaba pensando que quería que mi cuerpo se viera de determinada forma para ser feliz. Sin embargo, cuando puse mi felicidad primero, el cuerpo que deseaba vino después por sí solo. Fue un viaje de autodescubrimiento y ensayo y error".